A un año de Ayotzinapa: ni perdón ni olvido; “las cosas se pondrán cabronas”, advierten
Acapulco, agosto 11.-Al cumplirse un año de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, el próximo 26 de septiembre del 2015, el grito de dolor y coraje que ha recorrido México, Estados Unidos, Canadá, Europa y Centro América, por parte de los familiares, ha sido uno: ni perdón ni olvido.
El recorrido por México inició en el municipio de Tixtla y su objetivo fue el articular un movimiento nacional que presionara a las autoridades para encontrar a los 43 normalistas secuestrados el 26 de septiembre del 2014 en la ciudad de Iguala.
El reclamo persiste, porque no hay espacio para el perdón y mucho menos para el olvido.
Protestaron ante la PGR, también en la residencia oficial de Los Pinos, así como en las embajadas, se reunieron con Organizaciones No Gubernamentales de Derechos Humanos, incluso, sostuvieron una reunión con integrantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en el estado de Chiapas.
Los familiares de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa salieron a las calles de la Ciudad de México con un mensaje que han repetido ante las autoridades desde aquel 26 de septiembre: ¡Vivos se los llevaron y vivos los queremos!
Luego de recorrer México, iniciaron una gira por 43 ciudades de Estados Unidos para difundir su situación ante instituciones norteamericanas, organizaciones internacionales y la comunidad latina.
La gira, denominada Caravana 43 sostuvo reuniones con integrantes la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y Amnistía Internacional durante su paso por la unión americana.
Durante su gira por Estados Unidos, los familiares de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa cruzaron Canadá recorriendo ciudades de este a oeste, posteriormente una comitiva partió a Europa para recorrer en poco más de un mes 13 países.
Al internacionalizar el conflicto, rompieron el cerco informativo tendido alrededor de sus exigencias dentro del país, logrando establecer alianzas con movimientos, organizaciones e instituciones en el ámbito internacional para presionar al gobierno federal.
Algunos familiares de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa llevaron a cabo la Caravana Sudamérica 43, para continuar difundiendo su grito de justicia por Argentina, Brasil, Uruguay y Montevideo.
Las protestas de los familiares no han cesado a 11 meses de la desaparición de los 43 normalistas.
El pasado mes de Julio, reunidos en el Hemiciclo a Juárez, en la Ciudad de México, los familiares prometieron que no regresarían a sus casas hasta que regresen sus hijos.
Este 3 de agosto, los familiares de los normalistas participaron en una caravana en el estado de Oaxaca, donde advirtieron: “Si nuestros hijos no regresan a casa antes del 26 de septiembre, las cosas se van a poner más cabronas”,
Al cumplirse un año de la desaparición de los 43 normalistas en la ciudad de Iguala, la ‘‘verdad histórica’’ del gobierno federal sobre la desaparición de los estudiantes de la Normal de Ayotzinapa no ha convencido al país ni tampoco a la comunidad internacional.
México cambio después del 26 de septiembre del 2014, y después del 26 de septiembre del 2015 sigue cambiando, porque el caso Ayotzinapa desnudó la corrupción y la impunidad que priva en el país, además los padres de familia advierten que se llegará hasta las últimas consecuencias con dignidad y coraje y que no habrá más luchas aisladas.
Para los nuevos gobiernos electos, principalmente en Guerrero y otras entidades federativas, el caso Ayotzinapa los alcanzará, a través del grito de dolor y coraje que ha recorrido México, Estados Unidos, Canadá, Europa y Centro América, por parte de los familiares de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, porque a un año: “ni perdón ni olvido”.
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